En un esfuerzo conjunto liderado por la Universidad del Bío-Bío y respaldado por el gobierno regional a través del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC-R), estudiantes universitarios de seis instituciones académicas se sumergieron en el corazón de diversos emprendimientos de la región del Biobío. Esta iniciativa, parte del programa «Fortalecimiento del Capital Social en Jóvenes», ha traído consigo una experiencia de aprendizaje única tanto para los jóvenes como para los emprendedores locales.
Fueron cerca de 70 estudiantes de último año de distintas disciplinas quienes se involucraron activamente en un programa de formación denominado «Formación en Competencias de Capital Social». Dentro de este contexto, se formaron 13 equipos multidisciplinarios, cada uno asignado a un emprendedor de la región, proveniente de diversas comunas como Lebu, Cañete, Los Ángeles y Talcahuano.
Lo destacable de este proyecto fue el trabajo en terreno que llevó a estos estudiantes a sumergirse directamente en la realidad de los emprendimientos locales. Inicialmente, se ofreció asesoramiento de manera remota a través de sesiones virtuales, pero la experiencia culminó con visitas presenciales a los lugares de trabajo de los emprendedores, permitiendo una comprensión más profunda de los desafíos y oportunidades que enfrentan en sus respectivos sectores.
«Este programa ha sido una oportunidad excepcional para nuestros estudiantes. No solo han podido aplicar los conocimientos adquiridos en sus carreras, sino que también han contribuido directamente al crecimiento y desarrollo de emprendimientos en nuestra región», expresó Paula Quiñones, coordinadora del diplomado.
Experiencia vivencial
Amanda Arratia, creó junto a su socia un bazar de frutos secos a granel en Lebu llamado «Eco Imperio Vitamínate». «Esta experiencia me parece muy bien, muy enriquecedora, porque es una mirada desde fuera del negocio de uno, de cosas que uno no ve y cosas que uno puede mejorar, pero no tiene los conocimientos necesarios y que ellos vengan con su mirada más fresca y llena de conocimientos se agradece», señaló.
El intercambio entre estudiantes y emprendedores no solo ha aportado nuevas ideas y soluciones innovadoras a estos proyectos, sino que también ha fortalecido el tejido social y las redes colaborativas en la región del Biobío. Esta experiencia ha demostrado el poder del trabajo colaborativo y la importancia del capital social en el progreso económico y social de la comunidad.
Este programa es financiado por el gobierno regional del Biobío a través del fondo de Innovación para la Competitividad (FIC-R), es ejecutado por la Universidad del Bío-Bío en colaboración con otras 5 universidades: Universidad Católica de la Santísima Concepción, Universidad de Concepción, Universidad Santo Tomás, Universidad San Sebastián y Universidad del Desarrollo. Además del apoyo de la corporación Desarrolla Biobío.
Para más detalles sobre este programa y sus logros: https://www.instagram.com/capitalsocial_biobio/ y https://capitalsocial.ubiobio.cl/